Querido diario, hoy no me ha pasado nada especialmente relevante, bueno, no
ha hecho sol y por lo tanto no he podido salir a la piscina exterior, pero eso
no es importante. Lo que sí que es importante es la temática de la que habla la
película con la que vengo hoy.
"Piedras" cuenta la historia de una serie de mujeres, cinco para
ser más exactos, que caminan por Madrid, cada una con un tipo de zapatos
distinto, cada una con una vida totalmente distinta, y por lo tanto con
problemas distintos, pero con un objetivo en común, encontrar la horma de su
zapato, o lo que viene a ser lo mismo, el hombre que está hecho para ellas.
Podría decirse, por la descripción, que es la versión española de "Sexo
en Nueva York", pero no sería verdad. Sí, puede que cada uno de los
personajes represente a un arquetipo de mujer, pero me parece que el director
ha querido ir más allá, por no decir que los personajes de esta cinta creo que
tienen mucha más profundidad de la que cabía esperar para ciento treinta
minutos.
Con el director de la película estoy en duda, reconozco que esta es la única
película suya que he visto, pero cuanto más leo sobre él, más ganas tengo de
ver más películas suyas. Tengo un placer oculto, muchas veces se dice que el
cine español no demasiado bueno, o que siempre trata sobre las mismas
temáticas, pero aún así, hay muchas películas de directores españoles que me
encantan, y creo que he encontrado un nuevo director al que seguir. Desde luego
Ramón Salazar nos puede llegar a ofrecer muchas horas de buenas películas.
Creo, personalmente, que el reparto de la película de hoy es su principal
atractivo. Por un lado tenemos a Antonia San Juan y a Mónica Cervera, por otro
a Mónica Cervera, a Nawja Nimri, a Ángela Molina y a Vicky Peña. Todas ellas actrices muy
destacadas del cine español, cada una en su registro.
Realmente recomiendo muy encarecidamente esta película, sobretodo para
aquellos que disfrutan del buen cine español, y que no necesariamente siempre
buscan comedias.
Lo mejor: haber descubierto a su director, y Mónica Cervera a quien admiro
mucho.
Lo peor: alguna de las historias es menos interesantes que otras, pero aún
así el conjunto general deja muy buen sabor de boca.
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