La princesa prometida (1987)

La verdad es que no sé si realmente había visto la película con la que vengo hoy, o no. Tengo vagos recuerdos de ella, pero también tengo una imaginación, a veces, demasiado vital, y puede que simplemente me la hubieran contado. Sea como sea, hoy vengo encantado.

"La princesa prometida" empieza con un niño y su abuelo, este último le lee un libro al nieto, pero en realidad estos interludios son lo de menos, porque la película no va de eso. Buttercup es una joven campesina que jura amor eterno al mozo que trabaja en su granja. Westley, parte para hacer fortuna y así casarse con la joven, pero el barco en el que viaja es abordado por un malvado pirata que lo mata. Cinco años después, el futuro rey reclama a Buttercup como su esposa, ella dispuesta a morir se abandona a un oscuro futuro. Es entonces cuando hacen acto de presencia Iñigo Montoya, Fezzik, Vizzini y un misterioso hombre de negro enmascarado.

Que grata sorpresa me he llevado al descubrir ahora mismo que el director de tan maravillosa película no es un completo desconocido para tan ilustrísimo blog. Se trata de Rob Reiner, de quien ya hemos visto "Misery" y "Ahora o nunca", y algo me dice que esta no será la última película suya que veremos. Me gusta saber que sigue en activo.

La cinta está protagonizada por Cary Elwes quien prácticamente cómo secundario, no ha parado de trabajar desde que empezó a trabajar allá por el años 1979, algunos de sus trabajos más famosos últimamente han sido "Psych" y su aparición en "Saw". Mandy Patinskin ha desarrollado gran parte de su trabajo en series de televisión y cómo actor de doblaje. La otra gran protagonista de esta historia fue Robin Wright, quien alcanzó cierta fama con "Forest Gump" y "Moll Flanders: el coraje de una mujer". Además de estos tres actores principales, también podemos disfrutar de Chris Sarandon, Christopher Guest, Wallace Shawn, André The Giant, Fred Savage, y Billy Crystal.

Esta película contó con una nominación a los Oscars, a la mejor Banda Sonora.

Es curioso, y no debería serlo, que el guionista de la película, y el escritor del libro en el que está inspirada, sean la misma persona. Gracias William Goldman.

Lo mejor: lo entretenida que es, me ha parecido fantástica.

Lo peor: la participación de Fred Savage.