"Cortocircuito" es la historia de un robot al que le cae un rayo, y le modifica la programación. Dicha modificación hace que pase de ser un robot con fines militares, a tener más interés en huir de la base donde está recluido y tocar instrumentos musicales.
Niños y niñas, si te pica una araña modificada genéticamente no te da poderes, si te cae un rayo no te da poderes, seguramente te quemará los órganos internos y tendrás una muerte muy dolorosa. ¿Puede un robot morir? Bueno, da lo mismo, dejemos de enviarle a nuestros hijos mensajes confusos.
La película de hoy fue dirigida por John Badham, y lo que creo efectivamente el jamón que desayunó ese día estaba malo, para que se le ocurriera una idea tan extraña. No me estoy metiendo con la película, que al fin y al cabo es una de esas cintas de los ochenta donde el protagonista tiene que huir, véase "Maniquí" o "1,2,3...Splansh". Por lo visto todo en los ochenta todo el mundo quería huir, y hoy, yo quiero huir a los ochenta. Pero me estoy desviando del tema, Badham es más conocido por haber dirigido películas como "Fiebre del sábado noche" o "Juegos de guerra".
El film está protagonizado por Ally Sheedy, a quien vimos en "El club de los cinco", y por Steve Guttenberg, que lejos de ser familia del famoso creador de la imprenta, es más conocido por participar en "Loca Academia de Policía".
Desde luego no es una de mis películas favoritas, pero admito que las películas de esta época tienen un algo que hace que percibamos que son menos malas de lo que realmente son.
Lo mejor: la banda sonora es bastante buena.
Lo peor: que a estas alturas se estén planteando hacer una tercera parte. Porque sí, hicieron, en su momento, una segunda.
Por cierto, no me odiéis por no defender esta película, en los ochenta se hicieron muchas películas mejores que esta.
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