Antes, la gente era más sencilla, incluso más pueril, pero gracias a ellos eran capaces de disfrutar de los pequeños placeres que ofrece la vida. Ahora siempre queremos más, y cuanto más caro mejor. Ya no nos basta con cosas sencillas, de hecho, si te gustan las cosas sencillas es porque debes de ser un pobre, o un hipster.

"Sombrero de copa" narra las aventuras de Jerry Travers, un bailarín americano que viaja a Londres, donde va a protagonizar una obra. Una vez en Londres se aloja en la habitación de su productor, y allí sin querer molestará a Dale Tremont, la vecina de abajo. Ambos a causa de una serie de malentendidos emprenderán un recorrido por Europa, que incluirá bodas por despecho.
¿De verdad? Si de repente hubiera un bailarín en mi habitación y se pusiera a bailar a las tantas de la madrugada lo que menos pensaría es que debe de ser una maravillosa persona. Y señorita Tremont, si quiere darle celos a quien sea, no se case con un modista, todo el mundo sabe de qué pie cojean. En cierto modo tiene su encanto esta inocencia tan característica de la época dorada de Hollywood.
Este film esta protagonizado por Fred Astaire y Ginger Rogers, quienes participaron en cuantiosas películas juntos.
Dirigida por Mark Sandrich.
He tenido un gran problema al ver esta película. No sé si la versión que he visto ha sido con material inédito o qué diablos ha pasado, pero había varios dobladores diferentes para cada personaje.
Lo mejor: la inocencia con la que se hacían este tipo de películas.
Lo peor: creo que esta película no tiene la capacidad de captar a la gente de mi generación.
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